Chinchillas

La chinchilla es un roedor de mediano tamaño. Son animales sociales, viven en grupos y están continuamente relacionándose. Por tanto, debemos prestarle mucha atención y no limitarnos a darles de comer y beber, sino interactuar con ellas.

Las chinchillas no son animales agresivos, jamás morderán a una persona, excepto que las manos huelan a comida y confundan el dedo con un trozo de manzana. En este caso no será culpa de la chinchilla, sino de no habernos lavado las manos. Son animales bastante dormilones durante el día y activos en el atardecer, pero se pueden acostumbrar a diferentes horarios.

Un comportamiento extraordinario de las chinchillas y que les diferencia de todos los demás animales domésticos es su afición por los baños de arena. Debe emplearse una arena muy fina que se vende especialmente para ellas. Se les debe bañar durante unos 20 minutos como máximo y con una frecuencia que dependerá de la humedad de la zona. Como orientación se puede comenzar con dos o tres baños semanales. Si vemos que la chinchilla se rasca más de la cuenta se deben reducir los baños.

Las chinchillas son animales estrictamente herbívoros y son originarias de una zona árida con escasa cobertura vegetal y donde las plantas tienen una elevada cantidad de fibra y un escaso valor alimenticio. Tienen un aparato digestivo especialmente adaptado a este tipo de alimentación y no ingieren nunca restos animales, como sí hacen los hámsteres por ejemplo. Lo fácil será proporcionarles alimento comercial para chinchillas y ocasionalmente le podemos dar un trocito de manzana.